- ¡Hola muchachos, mucho gusto! Cuéntanos, ¿Cómo se conocieron y como decidieron formar la banda?
Mariano: Viaje nace como un proyecto paralelo a Narcoiris. La idea en un principio fue solo grabar algunas ideas que tenía dando vueltas. Yo soy bajista, pero tenía pendiente tocar la guitarra en algún proyecto y en ese momento yo tenía una guitarra criolla y era la que usaba para componer hasta las líneas de bajo a veces. En los primeros ensayos con el baterista enchufaba esa guitarra a unos amplificadores valvulares y la procesaba con disto, delay, phaser y alguna otra cosa. Así los temas comenzaron a tener forma y al poco tiempo fuimos a el estudio El Attic solo los dos y grabamos varias de las canciones que forman parte del Volumen 1, Regresar, El Isleño, Talisman. Luego se fueron sumando amigos a poner lo suyo. Mayormente los invitaba al estudio sin mucha info, agarraban los instrumentos y se resolvía todo ahí, hay solos y arreglos que son de la primera toma. Después de unos meses teníamos un disco y el nombre de la banda ya lo tenía desde que leí el libro de Castaneda, me había quedado rebotando y la música que hicimos tenía que ver con música viajera, todo cerraba. En ese momento se iniciaba el sello South American Sludge y nos propone editar el disco y lo hicimos. A partir de ahí empezaron a salir fechas y no quedaba otra que armar una banda jaja. Al poco tiempo empezamos a tocar en la escena local y no paramos hasta el día de hoy.

- Su sonido es bastante especial y ha estado mutando desde su formación. ¿Cómo se describirían ustedes?
Mariano: Viaje es un lugar desprejuiciado, hacemos lo que se nos ocurre con total libertad, sin respetar ningún molde, todo lo contrario. Más allá del cambio de integrantes que inevitablemente hacen que todo vaya sonando distinto vamos haciéndolas cosas siguiendo el impulso, el primer impulso. Si hay una idea tratamos de llevarla adelante de inmediato, antes de que esa idea quede vieja. Suele pasar que nuestros discos los aprendemos a tocar después que los grabamos, por decirlo de alguna manera. Quizá nuestras grabaciones no son perfectas, pero suenan vivas, frescas, eso tratamos de llevarlo adelante en todos nuestros discos. Creemos que como individuos estamos en un cambio constante y es lo que queremos representar en nuestros discos.
- Nos podrían explicar ¿cuáles fueron sus influencias al inicio y cuales han estado siendo sus influencias durante todos estos años?
Jeque: Creo que las influencias son algo más personal que grupal. Cada músico trae su universo sonoro a la banda y la mezcla de todas esas influencias terminan generando el resultado final. Por suerte, cada integrante en este momento está en una página diferente del libro, y eso afecta a la música de viaje de forma positiva. Para que una banda suene como la nuestra, buscando siempre un ángulo nuevo, probando cosas, es necesario salirse del molde, y una parte importante de eso es no estar atado musicalmente a los parámetros del estilo que tocamos. Eso lo trae cada uno a la sala de ensayo desde el living de la casa.

- Tienen una amplia discografía, para ustedes. ¿Cuál es el disco que más trabajo les causo y cuál es su disco favorito?
Mariano: llevamos muchos años haciendo esto y siempre hubo buenos músicos en la banda y nunca fue muy trabajoso, solemos grabar en pocos días y lo hacemos con amigos, eso hace que todo sea más sencillo. Mayormente los discos los plantemos como desafíos, tenemos una idea de inicio y durante un tiempo corto la impulsamos y la llevamos al máximo, es algo vertiginoso y arriesgado, pero nos manejamos bien en esas tormentas jaja. Debería decir que el último, pero todos los discos marcan un momento, el estado de ánimo de esos días. Disfruto mucho ese proceso creativo y si bien no escucho muy seguido nuestros discos cuando lo hago me llevan a ese momento, de cuando fueron grabados y en las circunstancias de ese momento. Si tendría que nombrar uno te diría el primero, es un disco muy personal.
- En mi caso, mi disco favorito de ustedes es Calma II. ¿Cuál es la historia detrás del disco y cuáles fueron sus influencias?
Mariano: lo que pasó con este disco es descabellado. Resulta que Leo Aldegani, quien toco la batería en Volumen 1, se fue a vivir a Inglaterra. Estaba de visita en Buenos Aires y se nos ocurrió que estaría bueno juntarnos a grabar algo. Yo tenía una idea de lo que quería hacer. ¡El Jeque Raffo en una gira que habíamos hecho por el interior me hizo escuchar Neu! y me había quedado eso dando vueltas y quería hacer algo así krautrockero. Charla va charla viene imaginando que hacer se nos confunden las fechas, Leo estaba a una semana de volverse a Inglaterra y ni siquiera nos habíamos juntado a ensayar. Salimos en busca de un estudio de grabación y lo conseguimos, va en realidad lo consigue Damián Colaprete, que era el ingeniero con el que habíamos grabado Vol. II y nos operaba en vivo desde el principio. Con sólo 5 días por delante no metimos a componer, desde cero. En ese disco yo toco el bajo y la idea fue armar bases concretas con Leo en una nota, algún riff y pocos cambios. El trabajo más difícil lo tenían Raffo y Fer Figueiras, ellos armaron las melodías mientras el bajo y la batería zapaban. Metimos cuatro ensayos intensivos y terminamos grabando los cuatro temas que quedaron en el disco y dos más que delataban que no habíamos ensayado tanto y quedaron afuera. En Calma II se vuelve a reflejar el impulso, la inmediatez como en los discos anteriores.
- ¿Cómo fue el proceso de composición y grabación de su ultimo EP, Laberintos y Paisajes?
Jeque: Bastante complejo la verdad. Antes del Aislamiento Obligatorio por COVID, habíamos hecho una sesión de grabación en nuestra sala para la preproducción un disco. El audio estaba bastante bien logrado para ser un demo, y cuando quedamos todos separados en nuestras casas, surgió la idea de convertir esos audios en temas finales. Trabajamos cada uno por la suya, a la distancia, y logramos completar los temas del EP y algunos más que pronto saldrán también.
- Háblenme un poco sobre el estado actual de la banda, a donde apunta, cuáles son sus próximas metas.
Jeque: Tenemos un par de temas más para sacar, y ya estamos pensando en lo siguiente. Creo que llego el momento de volver al formato LP, y ver como acompañarlo desde un lugar más actual desde la comunicación de la música. El foco esta puesto mucho en el cómo más que en el qué. Nosotros como músicos ya funcionamos de forma excelente. No nos faltan canciones, no nos complican las grabaciones y no tenemos problemas con llevar a cabo producciones. Es el momento de concentrarse en que cosas nuevas no hemos hecho y cómo podemos introducir nuestra música en ello. El streaming es un ejemplo perfecto de esto.

- ¿Como ven la escena argentina respecto a la influencia que está teniendo la pandemia en ella?
Jeque: Por el momento, no muy alentador. Pero hay que esperar a ver como resurge. No todos los cambios tienen que ser malos o traumáticos. Ahora la situación está muy difícil de analizar, hay mucha incertidumbre. Es muy probable que algunas cosas cambien totalmente, y hay que esperar un poco más para ver como adaptarse a ello.
- Están a punto de estrenar una sesión en vivo que promete mucho. ¿Qué podemos esperar?
Jeque: Aprovechamos para darle una vuelta de rosca a lo que nosotros ofrecimos por muchos años. Un buen show musical que ahora permite al espectador verlo desde adentro. Quisimos introducir al espectador dentro del escenario con nosotros, para que vea los detalles de nuestro show, de cómo hacemos música. Es la oportunidad
